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Donde está la revolución?
Nunca he sentido temor al decir la verdad. Pero en la noche de ayer fechada 28 de Mayo del 2008 las insistencias de mis amigos casi apagan mi voz de protesta. No digas nada. Igual nadie te va hacer caso. A nadie le importa tu opinión. Al fin igual van hacer lo que ellos quieren, decían mis amigos. Pensé por un segundo hacerles caso, pero de repente la conciencia empezó acusarme de mi silencio. Después, consciente de la necesidad de una mente libre, en paz, y en tranquilidad alce mi mano impaciente pidiendo permiso para expresar las palabras que me salían de la boca, el pensamiento que no cavia en mi cabeza, y el cólera que sentí en ese momento.
El señor embajador Hernán Olguín accedió a mi pedido, y entonces un flujo de palabras frenadas por mi conciencia empezaron hacer eco entre las paredes del Consulado General del Ecuador en Nueva York. – Señor embajador dije – entiendo y respeto la autoridad de las Sra. Ministra del Inmigrante Lorena Escudero, mas sin embargo no me parece lógico que ella decida la candidatura de tres personas para que en esta noche sean elegidas para el honorable puesto de coordinador general de la casa del inmigrante en Nueva York. Creo pues que el pueblo es soberano, y que todos aquí tenemos el derecho a elegir no a los candidatos que se nos den, pero a los que nosotros creemos capaces de ejercer las funciones de coordinador general, y creo que este derecho del pueblo tiene que ser respetado por que la voz del pueblo es la voz de Dios.
Quienes comprendieron mi cólera procedieron a apoyarme con sus aplausos, pero en el fondo se escucho la voz del embajador – las decisiones son de ella, y no se puede cambiar, comento –.
Si esas son las reglas del juego entonces permítanme la libertad de hacerles unas preguntas a los representantes del gobierno y a usted mi querido lector. Es este el gobierno de la revolución ciudadana? Es este el gobierno que remplazo al títere de Gutiérrez porque empezó poniendo a su familia en cargos públicos y no a las personas competentes? Es este el gobierno que proclama que el pueblo manda y no los gobernantes? Es esta la democracia que se piensa implementar, yo te doy la lista de quien tu puedes elegir? Y ustedes mis amigos por que se callaron ante semejante humillación, ante semejante irrespeto a nuestros derechos?
Donde está la revolución? Un cambio no será posible si al pueblo se le niega nombrar sus propios candidatos. Cuál es la diferencia entre este gobierno y los demás que le precedieron? Gutiérrez se toma la libertad de poner a su familia bajo el mando de cargos públicos y este se toma la molestia de nombrar la candidatura del esposo de la asambleísta oficialista Linda Machuca, - todo queda entre ellos –. Que esta es una nueva democracia? Entonces permitan que el pueblo se exprese, que el pueblo elija a sus candidatos, y no nos den a escoger entre sus candidatos.
A parte de expresar que la ministra y no el pueblo tiene el derecho de escoger (ojo dije escoger no elegir) sus candidatos el embajador Olguín, hizo pública su intención de sugerir a la ministra que se les considere un puesto para los candidatos perdedores en la casa del inmigrante. En otras palabras mi querido lector, no importa lo que usted diga, no importa el rechazo que usted exprese, no importan cuanto usted deteste a uno de esos candidatos, aquí en esta democracia igual los perdedores salen ganando. Y ellos los perdedores coordinaran las cosas que la casa del inmigrante se propone hacer en bien de la comunidad. Que viva la revolución! Que viva la democracia! La tontería ya es de todos!.
Lamento que en este articulo que no es más que un derrame de cólera tenga que expresar el nombre de un gran compatriota y que también estuvo en la lista de candidatos, el señor Oscar Paredes. Dicho compatriota hizo lo que un hombre honorable debía hacer, y procedió a retirar su candidatura. Amigo Oscar, un hombre no necesita estar bajo un cargo público para brillar con luz propia, y su trabajo ejemplar es una buena lección para los otros dos gansos, - digo dos candidatos-.
Antonio Arizaga quien ni siquiera estuvo presente en la reunión es otro de los escogidos por la ministra – comprenda usted amigo lector que este señor no es del partido de gobierno, pero la estrategia si parece serlo –. Este señor después de años de “liderazgo” en la comunidad, después de “años de trabajo incansable por los inmigrantes” pertenece al Frente Unido de Trabajadores, y en las elecciones para asambleísta en el 2007 según datos del Tribunal Supremo Electoral quedo en séptimo lugar con 55 votos nominales. Qué vergüenza! En este charlatán la ministra ve el liderazgo que la comunidad necesita. O fue este el plan para asegurarse la ganancia del señor Vera?
El señor Julio Vera después de años trabajando gratis para la comunidad inmigrante es el esposo de nuestra asambleísta Linda Machuca quien en las elecciones del 2007 obtuvo 75 votos nominales. El pueblo no la escogió por su liderazgo, ni mucho menos por el trabajo de su esposo pero porque pertenece al partido de gobierno. En otras palabras si la Sra. María del Carmen Gavilanes quien obtuvo 7 votos en las elecciones formaba parte del Movimiento País, ella nos representaría ahora en la asamblea.
Así es como esta democracia funciona. Así es como esta revolución ciudadana se piensa llevar a cabo. Así es como nuestros representantes juegan con el pueblo. En este nuevo rumbo político que se nos pretende hacer creer, el pueblo no es el que manda pero el mandado a escoger de entre una lista de candidatos.
Ya vienen las fiestas de agosto, quien cree usted amigo que estará tropezándose en los desfiles y en las primeras páginas de los periódicos? Será el Sr. Carlo Andrés Rivas quien quedo en segundo lugar en las elecciones (voto nominal) o el Sr. Joseph Gavilanes quien después de años de trabajo voluntario, el pueblo le “premio” con 26 votos y le ubico en el lugar 17 de los 18 disponibles?
Y si mañana a la ministra se le ocurre nombrar como candidatos al Sr. Gavilanes quien parece no contar ni siquiera con el apoyo de su esposa, o al Sr. Marcelo Arboleda a quien su periódico le ayudo a conseguir 42 votos en las elecciones, sepa usted querido lector que lo que la ministra dice no se cambia, y aunque uno de esto candidatos pierda, igual el embajador Olguín pedirá que estos seres humanos tan detestados en la comunidad de alguna manera lleguen a ser parte de la casa del inmigrante.
Este es un nuevo modelo de democracia, el cual no se aprende en la escuela, pero se aprende en la calle. QUE VERGÜENZA.
Fausto Sicha.
Nunca he sentido temor al decir la verdad. Pero en la noche de ayer fechada 28 de Mayo del 2008 las insistencias de mis amigos casi apagan mi voz de protesta. No digas nada. Igual nadie te va hacer caso. A nadie le importa tu opinión. Al fin igual van hacer lo que ellos quieren, decían mis amigos. Pensé por un segundo hacerles caso, pero de repente la conciencia empezó acusarme de mi silencio. Después, consciente de la necesidad de una mente libre, en paz, y en tranquilidad alce mi mano impaciente pidiendo permiso para expresar las palabras que me salían de la boca, el pensamiento que no cavia en mi cabeza, y el cólera que sentí en ese momento.
El señor embajador Hernán Olguín accedió a mi pedido, y entonces un flujo de palabras frenadas por mi conciencia empezaron hacer eco entre las paredes del Consulado General del Ecuador en Nueva York. – Señor embajador dije – entiendo y respeto la autoridad de las Sra. Ministra del Inmigrante Lorena Escudero, mas sin embargo no me parece lógico que ella decida la candidatura de tres personas para que en esta noche sean elegidas para el honorable puesto de coordinador general de la casa del inmigrante en Nueva York. Creo pues que el pueblo es soberano, y que todos aquí tenemos el derecho a elegir no a los candidatos que se nos den, pero a los que nosotros creemos capaces de ejercer las funciones de coordinador general, y creo que este derecho del pueblo tiene que ser respetado por que la voz del pueblo es la voz de Dios.
Quienes comprendieron mi cólera procedieron a apoyarme con sus aplausos, pero en el fondo se escucho la voz del embajador – las decisiones son de ella, y no se puede cambiar, comento –.
Si esas son las reglas del juego entonces permítanme la libertad de hacerles unas preguntas a los representantes del gobierno y a usted mi querido lector. Es este el gobierno de la revolución ciudadana? Es este el gobierno que remplazo al títere de Gutiérrez porque empezó poniendo a su familia en cargos públicos y no a las personas competentes? Es este el gobierno que proclama que el pueblo manda y no los gobernantes? Es esta la democracia que se piensa implementar, yo te doy la lista de quien tu puedes elegir? Y ustedes mis amigos por que se callaron ante semejante humillación, ante semejante irrespeto a nuestros derechos?
Donde está la revolución? Un cambio no será posible si al pueblo se le niega nombrar sus propios candidatos. Cuál es la diferencia entre este gobierno y los demás que le precedieron? Gutiérrez se toma la libertad de poner a su familia bajo el mando de cargos públicos y este se toma la molestia de nombrar la candidatura del esposo de la asambleísta oficialista Linda Machuca, - todo queda entre ellos –. Que esta es una nueva democracia? Entonces permitan que el pueblo se exprese, que el pueblo elija a sus candidatos, y no nos den a escoger entre sus candidatos.
A parte de expresar que la ministra y no el pueblo tiene el derecho de escoger (ojo dije escoger no elegir) sus candidatos el embajador Olguín, hizo pública su intención de sugerir a la ministra que se les considere un puesto para los candidatos perdedores en la casa del inmigrante. En otras palabras mi querido lector, no importa lo que usted diga, no importa el rechazo que usted exprese, no importan cuanto usted deteste a uno de esos candidatos, aquí en esta democracia igual los perdedores salen ganando. Y ellos los perdedores coordinaran las cosas que la casa del inmigrante se propone hacer en bien de la comunidad. Que viva la revolución! Que viva la democracia! La tontería ya es de todos!.
Lamento que en este articulo que no es más que un derrame de cólera tenga que expresar el nombre de un gran compatriota y que también estuvo en la lista de candidatos, el señor Oscar Paredes. Dicho compatriota hizo lo que un hombre honorable debía hacer, y procedió a retirar su candidatura. Amigo Oscar, un hombre no necesita estar bajo un cargo público para brillar con luz propia, y su trabajo ejemplar es una buena lección para los otros dos gansos, - digo dos candidatos-.
Antonio Arizaga quien ni siquiera estuvo presente en la reunión es otro de los escogidos por la ministra – comprenda usted amigo lector que este señor no es del partido de gobierno, pero la estrategia si parece serlo –. Este señor después de años de “liderazgo” en la comunidad, después de “años de trabajo incansable por los inmigrantes” pertenece al Frente Unido de Trabajadores, y en las elecciones para asambleísta en el 2007 según datos del Tribunal Supremo Electoral quedo en séptimo lugar con 55 votos nominales. Qué vergüenza! En este charlatán la ministra ve el liderazgo que la comunidad necesita. O fue este el plan para asegurarse la ganancia del señor Vera?
El señor Julio Vera después de años trabajando gratis para la comunidad inmigrante es el esposo de nuestra asambleísta Linda Machuca quien en las elecciones del 2007 obtuvo 75 votos nominales. El pueblo no la escogió por su liderazgo, ni mucho menos por el trabajo de su esposo pero porque pertenece al partido de gobierno. En otras palabras si la Sra. María del Carmen Gavilanes quien obtuvo 7 votos en las elecciones formaba parte del Movimiento País, ella nos representaría ahora en la asamblea.
Así es como esta democracia funciona. Así es como esta revolución ciudadana se piensa llevar a cabo. Así es como nuestros representantes juegan con el pueblo. En este nuevo rumbo político que se nos pretende hacer creer, el pueblo no es el que manda pero el mandado a escoger de entre una lista de candidatos.
Ya vienen las fiestas de agosto, quien cree usted amigo que estará tropezándose en los desfiles y en las primeras páginas de los periódicos? Será el Sr. Carlo Andrés Rivas quien quedo en segundo lugar en las elecciones (voto nominal) o el Sr. Joseph Gavilanes quien después de años de trabajo voluntario, el pueblo le “premio” con 26 votos y le ubico en el lugar 17 de los 18 disponibles?
Y si mañana a la ministra se le ocurre nombrar como candidatos al Sr. Gavilanes quien parece no contar ni siquiera con el apoyo de su esposa, o al Sr. Marcelo Arboleda a quien su periódico le ayudo a conseguir 42 votos en las elecciones, sepa usted querido lector que lo que la ministra dice no se cambia, y aunque uno de esto candidatos pierda, igual el embajador Olguín pedirá que estos seres humanos tan detestados en la comunidad de alguna manera lleguen a ser parte de la casa del inmigrante.
Este es un nuevo modelo de democracia, el cual no se aprende en la escuela, pero se aprende en la calle. QUE VERGÜENZA.
Fausto Sicha.
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